• Prevención en niños:

Es importantísimo consultar precozmente para detectar en niños problemas de crecimiento en los maxilares. Existen tratamientos ortodoncicos interceptivos que mejoran las condiciones esqueléticas para la posterior erupción de las piezas dentarias definitivas.

• Blanqueamiento dental:

El uso de técnicas de blanqueamiento debe ir acompañado de una higiene adecuada y disminuir el consumo de café, te, mate y cualquier otra infusión que pigmente el esmalte dental. Así también el hábito de fumar esta contraindicado en aquellos pacientes que deseen tener los dientes más blancos.

• Cepillado diario:

El hábito de cepillar los dientes debe ser instalado desde muy chico, ya que las bacterias son las responsables de la enfermedad de caries y tejidos que rodean el diente.

• Visita periódica al odontólogo:

Se recomienda consultar al odontólogo cada 6 meses, para que el profesional pueda detectar caries incipientes o cualquier lesión de tejido blando que pueda ser diagnosticada a tiempo y tratada sin grandes perdidas de los tejidos duros y blandos.

• Reponer las piezas dentarias perdidas:

La reposición de las piezas dentarias previene que otras piezas sufran movimientos y pérdidas posteriores, ya que existe un equilibrio entre ellas. El ideal es preservar cada pieza dentaria en forma individual y en el caso de haber agotado todas las instancias de conservación y este indicado la extracción la mejor manera de reponerla es a través de un implante dental.

• Implantes:

Los implantes dentales sirven para reponer piezas dentarias en forma fija y definitiva, estimulan el hueso para que de esta forma no se reabsorban los rebordes alveolares. Es una práctica quirúrgica que requiere estudios previos radiográficos y tomograficos, además una historia clínica del paciente.